¿Quién necesita tu arquitectura? ¿Qué problema resuelve? ¿Cómo?
Si queremos desarrollarnos como arquitecto independiente profesionalmente de una forma libre, estable y próspera necesitamos saber cómo conseguir clientes y proyectos de arquitectura de manera recurrente.
Debemos entender cómo funciona el mercado y los negocios de arquitectura. Saber hablar de clientes y de dinero. Practicar la escucha activa. Mantener a raya el ego del arquitecto y descubrir cuáles son aquellas necesidades del mercado que otros arquitectos no están sabiendo ver.
Debemos aprender cómo detectar nichos de oportunidad con potencial y captar clientes.
En este artículo te vamos a ayudar a dar respuesta a los siguientes puntos:
- Cómo definir tu propósito profesional como arquitecto.
- Quién necesita tu arquitectura.
- Qué problema resuelve tu arquitectura.
- Cómo ayuda tu arquitectura.
En el Programa para Arquitectos Independientes te enseñamos cómo detectar un nicho de mercado que tenga una necesidad no resuelta, en el que otros arquitectos no están ofreciendo sus servicios, y te ayudamos a armar una propuesta de valor genuina que tus clientes valoren y estén dispuestos a pagar.
Si quieres encontrar un nicho con potencial en que conseguir clientes que valoren tu labor, solicita tu Sesión de Diagnóstico gratuita y sin compromiso para que analicemos tu caso al detalle y ver sí y cómo te podemos ayudar.
Hay un concepto muy bonito de origen japonés que tiene que ver con tu razón de ser como profesional y con tu propósito, el Ikigai. Una idea que combina cuatro elementos:
1. Lo que te gusta.
2. Lo que se te da bien.
3. Lo que da dinero.
4. Lo que el mundo necesita.
La combinación de lo que te gusta y lo que se te da bien lo podríamos llamar pasión. No tiene por qué darte dinero, ni tiene porqué resolver una necesidad del mundo. Simplemente te gusta y se te da bien.
La mezcla de lo que se te da bien y lo que da dinero es lo que podemos llamar profesión. Se trata de unas habilidades que te sirven para generar un vehículo de vida. No te tiene que gustar.
La unión de lo que da dinero con lo que el mundo necesita se llama vocación. Consiste en ayudar a los clientes a resolver sus necesidades de manera remunerada. Ni te tiene que gustar, ni se te tiene que dar bien.
Y, por último, la suma de lo que el mundo necesita y lo que te gusta lo llamamos misión que no te tiene por qué dar dinero.
Conseguir enlazar estos cuatro ámbitos da como resultado el equilibrio profesional que buscas, tu propio ikigai, tu razón de ejercer como arquitecto.
Sin embargo, en la escuela de arquitectura sólo nos enfocamos en encontrar lo que nos gusta, lo que se nos da bien, pero al salir al mercado necesitamos también encontrar lo que el mundo necesita, lo que las personas valoran, por lo que nos pagarán.
Nadie paga por algo que no quiere o que cree no necesitar. Ni nadie paga por algo, más de lo que considera que vale.
En la escuela de arquitectura nunca hablamos de cómo detectar necesidades en el mercado por las que la gente esté dispuesta a pagar. Y, como consecuencia, hoy nos sentimos completamente desorientados porque desconocemos cómo ofrecer un servicio que nuestros clientes valoren o cómo podemos diferenciarnos en un panorama saturado de arquitectos.
¿Qué es un nicho y por qué es importante tener uno?
Un nicho es un grupo de personas que comparten un mismo problema, necesidad o deseo y que, además, son plenamente conscientes de esa carencia y quieren solventarla. Sin concretar un nicho, no es posible cerrar ningún cliente de calidad.
Es importante entender que, nadie que considere que está bien cómo está, pagará lo más mínimo por cambiar su situación. Por eso, para encontrar nuestro nicho es imprescindible escuchar, observar y empatizar con las personas. Entender qué les pasa, qué desean y qué aspectos de su vida valoran y quieren transformar.
Quién es tu cliente.
Qué problema o deseo tiene.
Cómo de importante y urgente es resolver ese problema para él.
Qué le impide resolver por sí mismo.
Cuáles son las consecuencias si no le pone solución.
Por qué necesita a un arquitecto y no a otro profesional.
Quién más intenta ayudar a ese cliente con su problema.
Qué es lo que te diferencia a ti de los demás arquitectos que luchan por ese cliente.
Si no somos capaces de dar respuesta a estas preguntas, significa que ofrecemos nuestro servicio a todo el mundo.
Ser generalistas y ofrecer la solución que ya brindan otros miles de arquitectos, es una estrategia que hace que nos devaluemos como profesionales y que muchas veces el cliente elija al más barato.
Por eso, definir un nicho de mercado es la clave para ejercer como arquitecto independiente de forma libre, estable y próspera.
Si conseguimos identificar un problema o deseo importante para alguien y somos capaces de ofrecerle una solución, nuestros clientes le darán a nuestro trabajo la importancia que se merece y nos convertiremos en agentes imprescindibles.
Y, cuanto mayor sea el valor que el nicho le da a la solución, mayor podrá ser nuestro precio. Porque la gente paga en función de lo que consiga lograr con tu servicio.
Cuando encontramos un grupo de personas que necesitan nuestra ayuda, sabemos que, si dejamos de ejercer de un momento a otro, la gente nos echará en falta. Y no hay nada más gratificante que sentirse parte del desarrollo de la sociedad. No hay nada más reconfortante que un cliente que confía, valora y respeta nuestra labor.
En el Programa para Arquitectos Independientes nos centramos en ayudarte a encontrar ese nicho de mercado con el que te sientas identificado y que tenga potencial para que puedas comprender qué necesitan y así ofrecerles un servicio que valoren y que, agradecidos, estén dispuestos a pagar.
Solicita tu Sesión de Diagnóstico (gratuita) › para comprender tu caso al detalle y explicarte cómo podría ayudarte sin ningún compromiso.
© 2023 CaterinaDeLaPortilla.com
Aviso Legal | Política Privacidad | Política de Cookies